Actualmente los inversionistas buscan oportunidades sostenibles para generar riqueza. Esas apuestas son realizadas con criterios financieros y ya están marcando la pauta a la hora de elegir un portafolio de inversión en la actualidad.
Para cada inversor, la marca ambiental de una compañía es cada día más importante por su compromiso que tenga con la sociedad. Pero ¿Sabes qué es una inversión sostenible?
La inversión sostenible consiste en invertir en el futuro de las empresas, quienes resolverán los mayores desafíos a los que se enfrenta la humanidad.
Es decir, se trata de promover nuevas formas de hacer negocios y crear una tendencia para motivar a más personas a invertir en el futuro construido por toda la población.
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A través de la combinación de enfoques de inversión tradicionales con perspectivas medioambientales, sociales y de gobierno corporativo, hoy los inversionistas, que incluyen desde instituciones globales hasta personas individuales, están adoptando un enfoque sostenible para alcanzar sus metas de inversión.
Invertir implica riesgos, incluyendo la posible pérdida de capital. Los rendimientos pasados no garantizan rendimientos en el futuro.
La inversión en los Criterios Ambientales, Sociales y de Buen Gobierno (ASG) en Estados Unidos es del 20 por ciento y asciende a 11 billones de dólares, mientras que en Europa la proporción es superior y alcanza los 17 millones de dólares, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Los ASG están estrechamente relacionados a la responsabilidad social y sostenibilidad futura.
Hay muchas formas de invertir de manera responsable. Los enfoques normalmente son una combinación de dos áreas transversales: “considerar asuntos ASG cuando se está construyendo un portafolio pueden incorporarse en prácticas de inversión existentes por medio de la integración, evaluación para filtrar (screening) e inversión temática”.
“Los inversores pueden incentivar a las empresas en las que ya han invertido para que mejoren su gestión de riesgos ASG o para que desarrollen prácticas comerciales más sostenibles”.
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Los Principios para la Inversión Responsable (PRI, por sus siglas en inglés) —promovidos por la Organización de Naciones Unidas (ONU)— son una iniciativa consistente en una red de inversores donde trabajan juntos para llevar a la práctica cada una de las siguientes iniciativas:
- Ser pioneros en incorporar las cuestiones ASG a nuestras prácticas y políticas de propiedad.
- Buscar una divulgación transparente de las cuestiones ASG por parte de las entidades en las que invirtamos.
- Promover la aceptación y aplicación de los principios en el sector de las inversiones.
- Trabajar en conjunto para mejorar nuestra eficacia en la aplicación de los Principios.
- Reportar nuestra actividad y progreso en la aplicación de los Principios.
- Alentamos a otros inversores a adoptar estos Principios.
Los activos, que son específicos a estrategias de inversión sostenible, han crecido de manera acelerada en los últimos años y parece que la tendencia continuará en fondos de inversión y ETF’s.
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