En medio de los problemas energéticos del mundo, este lunes 4 de octubre del 2021, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se reunieron para revisar su política de producción de petróleo.
La OPEP, sus aliados y Rusia llegaron al acuerdo de aumentar gradualmente la producción de petróleo en función de la demanda. Según sus estimaciones, la demanda del petróleo subirá por impulso las campañas de vacunación, que vislumbran una recuperación económica en todo el mundo.
El aumento gradual de la producción de petróleo responde a la política de producción bajo cautela adoptada por la OPEP, la oferta aumentará en 400.000 barriles de petróleo diarios.
La cantidad producida de barriles influirá en el precio del petróleo durante los próximos meses. Por el momento, el precio ya ha subido en 3% respecto al cierre anterior, siendo el máximo de los últimos tres años.
Los futuros petróleo Brent, de referencia en Europa, ha superado los 82 dólares por barril y están cotizando al alza. Los expertos de Goldman Sachs estiman que llegará a 90 dólares el barril de Brent este mismo año y alertan del posible freno a la recuperación económica.
En el caso del crudo West Texas en Nueva York, de referencia en el mercado internacional, su cotización está cerca de los 78 dólares el barril.
El aumento del precio del petróleo muestra que «(…) el petróleo cada vez más es un producto financiero que uno real, que está cada vez más sometido a las volatilidades propias de un producto financiero. La volatilidad depende de los fundamentales, y los del crudo son cada vez más ambiguos”, como señala Javier Santacruz.
De cara al futuro, y tras el acuerdo de la OPEP, los expertos estiman que la situación del petróleo puede causar una inflación en Estados Unidos, China y Europa. En ese sentido, el aumento de producción del petróleo y su equilibrio entre oferta y demanda será clave para su estabilización económica.