La carrera por hacerse con el mercado del turismo espacial se ha acelerado este año, con dos llamativos y millonarios empresarios alcanzando el espacio en naves propias en menos de 10 días: Richard Branson, el fundador del conglomerado Virgin Group y Jeff Bezos, el de Amazon.
Bezos ha sido el último en ponerse el traje de astronauta este lunes, cumpliendo así un sueño de su infancia. Su firma, Blue Origin, diseñó y construyó la nave New Shepard que lo llevó a la frontera espacial, a más de 100 kilómetros de la superficie terrestre, en un vuelo de poco más de 10 minutos.
En esta aventura lo acompañaron su hermano Mark, la piloto Wally Funk y Oliver Daemen, un joven hijo de un millonario. Cada uno marcó su propio récord: Funk, el de la mujer de más edad que haya ido al espacio (82 años); Daemen, el de la persona más joven (18 años); y Jeff y Mark Bezos, el de los primeros hermanos que hayan coincidido en el espacio.
El récord que se le escapó de las manos a Bezos fue el del primer empresario que va al espacio con un cohete propio: ese se lo llevó Branson con su firma Virgin Galactic el pasado 11 de julio. Su cohete, Unity, sobrepasó los 80 kilómetros de altura, aunque se quedó por debajo de los 106 kilómetros alcanzados por el New Shepard de Bezos.
Sin embargo, el de Bezos ha sido el primer vuelo espacial sin piloto y cuyos pasajeros son todos civiles. La nave cuenta con seis asientos y bastante espacio en cabina que es aprovechado durante los cuatro minutos que sus ocupantes pueden disfrutar de gravedad cero.
Aun así, ambos vuelos señalan un gran avance en el sector del turismo espacial en vuelos comerciales. Virgin Galactic, fundada en 2004, ha pasado por varios altibajos que incluyen un accidente mortal en 2014. Así que cuando Blue Origin anunció que Bezos volaría el 20 de julio, Branson se apresuró a adelantar la fecha de su vuelo para pasar a la historia como un pionero.
Su empresa también ha sido la primera compañía de vuelos espaciales comerciales cotizada. Tras debutar en Bolsa en 2019, el precio de sus acciones ha sido bastante volátil y ahora cotiza a alrededor de US$33. La firma prevé empezar a ofrecer sus servicios de manera regular en 2022 y ya cuenta con 600 reservas a un precio de US$250.000.
Pero Branson y Bezos no son los únicos millonarios que apuestan por el turismo espacial. El fundador de Tesla, Elon Musk, también tiene su propia empresa de vuelos comerciales al espacio, SpaceX, que se prepara para lanzar su primer cohete tripulado por civiles este año.
Bajo el nombre de Inspiration4, la nave de SpaceX será una cápsula Crew Dragon, el modelo diseñado por la compañía de Musk para transportar astronautas de la NASA a la Estación Espacial Internacional.
El primer vuelo compuesto solo por civiles estará ocupado por cuatro personas elegidas por Shift4Payments, una empresa de pagos ha comprado los cuatro asientos de la primera misión comercial de SpaceX.
Musk no participará en dicho vuelo, que también marcará un récord al ser la primera misión compuesta exclusivamente por civiles que dé la vuelta a la Tierra.