El pasado miércoles 9 de junio se aprobó la implementación de los certificados digitales de covid-19 o, mejor dicho, los “pasaportes covid” para poder circular por los países miembros de la Unión Europea. La decisión fue sometida a voto y tuvo 546 votos a favor, 93 en contra y 51 abstenciones.
El comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, expresó que el certificado garantiza que todos los ciudadanos de la UE y sus familias puedan viajar con seguridad y con mínimas restricciones. Reynders añadió que la estrategia busca incluir a Noruega, Islandia y Suiza, países que no forman parte de la Unión Europea.
El Certificado COVID Digital de la UE consiste en una acreditación digital de que una persona cumple al menos uno de estos requisitos:
• Ha sido vacunada contra la COVID-19
• Se ha realizado una prueba cuyo resultado ha sido negativo
• Se ha recuperado de la COVID-19.
A la fecha, hay nueve estados que han implementado el sistema de pasaportes covid: Bulgaria, Croacia, República Checa, Dinamarca, Alemania, Grecia, Lituania, Polonia y España.
Impacto en la economía
Según el Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades, más de 300 millones de personas han recibido la primera dosis en Europa, y al menos 100 millones ya están completamente vacunados. Cabe mencionar que Europa tiene aproximadamente 750 millones de habitantes.
- Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades: https://qap.ecdc.europa.eu/public/extensions/COVID-19/COVID-19.html#global-overview-tab
Esto significa la posibilidad de reabrir el turismo. Para el lunes 7 de junio, varios países europeos ya habían anunciado la apertura a turistas internacionales: Francia, España, Irlanda, Eslovenia, Países Bajos, Islandia, Croacia, Chipre y Reino Unido.
No obstante, el avance de la vacunación en Europa no parece ser suficiente para evitar un rebrote, advirtió la OMS. Según la oficina europea de la OMS, falta mucho para alcanzar la inmunización del 80% de la población adulta y advierte no cometer los errores del verano pasado.
Recordamos que el año pasado se criticó fuertemente a los países europeos como España o Reino Unido porque su población ignoró la cuarentena y fue a veranear a las playas sin usar mascarilla. Esto, sumado a la aglomeración en centros comerciales, es lo que ocasionó la segunda ola en Europa.