Con la confesión “me vacuné” del periodista argentino Horacio Verbitsky ha iniciado un grande escándalo en torno a las vacunas en Argentina. A partir de ello, se hizo público la existencia de “vacunados vip”, argentinos que han accedido a la vacuna sin respetar su turno y sin ser parte de la población de riesgo. Lo grave es que no solo se reveló que se estaba vacunando a un grupo de privilegiados, sino que se había estado vacunando en la misma sede del Ministerio de Salud de Argentina.
Se trataba de un secreto a voces que estalló este viernes 19 de febrero. Según las primeras investigaciones, el “Centro de vacunación vip” funcionaba en la sede de la cartera del Ministerio de Salud y se estaba politizando la vacunación. El grupo de privilegiados ya vacunados y otros “invitados” eran personas cercanas al gobierno: sindicalistas, escritores, periodistas e incluso no se descarta que algunos de ellos hayan pagado por la vacuna a sus “amigos del gobierno”.
Horacio Verbitsky
El jueves 18, él se saltó de la fila y recibió la primera dosis de la vacuna Sputnik V. En una entrevista, relató que logró vacunarse porque se contactó con su viejo amigo Ginés González García (para entonces Ministro de Salud de Argentina). Días después fue citado al hospital Posadas, pero no llego a ir, debido a que según comenta cuando estaba por ir, recibió un mensaje de la secretaria del Ministro de Salud y ella le dijo que iba a venir un equipo de vacunadores del Posadas al Ministerio y que fuera al Ministerio a recibir la vacuna.
Al día siguiente reveló lo sucedido públicamente, su revelación se hizo viral y ha causado un gran escándalo en todo Argentina. Hay investigación fiscal sobre el tema en todas las provincias de Argentina y también él ha sufrido consecuencias en su ámbito laboral. Ha sido despedido de la radio de Roberto Navarro y ya no seguirá con su columna en la radio “El Destape”.
Su ahora ex jefe y dueño de la emisora calificó su actuar como “una inmoralidad (…) que con 50 mil muertos haya vacunados VIP. Es inmoral quién lo autorizó y quién se vacunó”; y también enfatizó que “aquí no hay inocentes”.
Asimismo, este periodista ha sido criticado por los trabajadores del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), el organismo de derechos humanos que preside.
El pronunciamiento del CELS en su página oficial indica que «recibimos la noticia de que el presidente de nuestra organización fue vacunado por fuera del sistema establecido, a través de una cadena de favores y a título personal, mientras estábamos intentando, como todo el mundo conseguir un turno para las personas mayores de nuestras familias» y luego enfatizan entre otros mensajes que «como organización comprometida con los derechos humanos y con las urgencias de la situación social actual, consideramos que las únicas salidas a la pandemia son la responsabilidad colectiva y el compromiso con las etapas del sistema de vacunación a nivel federal».
CELS finaliza con “nada de lo ocurrido representa el trabajo y el pensamiento de quienes integramos y hacemos a la organización en su día a día». A pesar de este pronunciamiento hasta el momento no han especificado las acciones que tomarán contra Horacio Verbitsky.
Medidas y otros pronunciamientos públicos
En la lista de vacunados también figura el diputado Eduardo Valdés, quién dijo que “no pensé que estuviera haciendo algo ilegal, nunca le sacaría la vacuna a nadie, todo lo que hice fue porque viajaba a la ciudad de México y pensé que tenía que llegar vacunado”. Todo apunta a que se vacunaron personas ya sea cercanas al partido de turno o al ámbito personal del Ginés González García.
A raíz de todo ello, el presidente de Argentina Alberto Fernández, pidió públicamente la renuncia al Ministro de Salud. En la misma tarde, González García anunció su renuncia a través de una carta pública:https://www.sac.org.ar/institucional/carta-dirigida-al-ministerio-de-salud/
El ahora ex representante de la cartera de salud, calificó todo lo sucedido como “una confusión involuntaria” de su secretaría, expresó que no se debía haber citado a personas en el Ministerio para recibir la vacuna Sputnik V y que pese a ello asume su responsabilidad “por la equivocación”.
Inmediatamente fue nombrada Carla Vizzotti como Ministra de Salud. Ella ha sido bien aceptada pues es conocida por haber sido la encargada de llevar adelante las negociaciones con Rusia para la compra de las primeras dosis de la vacuna Sputnik V.
Sin embargo, el escándalo no ha terminado aún. Según el diario “La Nación”, el Ministerio de Salud se había reservado al menos, 3.000 vacunas para inmunizar a sus funcionarios, aunque no son población en riesgo. Ahora queda que la actual Ministra de Salud investigue sobre ello y también que las investigaciones de los fiscales en las provincias se concreten.
Por otro lado, Waldo Ezequiel Wolff, diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, exigió sanciones para los funcionarios vacunados y convocó un cacerolazo para el domingo. Patricia Bullrich, presidenta del partido Juntos por el Cambio (partido de oposición), calificó lo sucedido como “vergüenza nacional” y dijo que las vacunas se compran con el esfuerzo de todos los argentinos que pagan sus impuestos y que no puede repartirlas como si fueran de su propiedad.
Plan de vacunación
El plan de vacunación en Argentina estaba enfocado en inmunizar con la vacuna Sputnik V a los mayores de 70 años porque representan la población de mayor riesgo. Sin embargo, antes de este gran escándalo “Vacunas vip”, el plan de vacunación ya tenía complicaciones y críticas.
Para ser vacunados debían dar su consentimiento inscribiéndose y llenando la planilla en la dirección “https://vacunatepba.gba.gob.ar/”, a medida del número de vacunas que llegaba a la provincia y edad se asignaba un turno, pero la página colapsa constantemente.
Además, la prensa argentina ha señalado que el Ministerio de Salud ha enviado vacunas a las provincias sin calcular la población médica. Hay lugares que tienen vacunas para todo su personal médico e incluso a sobrado para alcaldes, familiares y amigos; mientras que, en otras provincias ni el 50% del personal médico ha llegado a vacunarse.